viernes, 16 de diciembre de 2016

Evaluación de fin de año

¡Qué buen año tuvimos en El escribiente!

Fue un ciclo de mucha estabilidad de asistencia de los talleristas y en el cual funcionaron muy bien las nuevas incorporaciones (ya les prometimos que a partir del año que viene les quitamos el mote de "nuevos"), destacándose la permanencia de Miriam y Valentín, que motorizaron al grupo y le dieron una nueva identidad. Lamentablemente Laura nos dejó a mediados de año por el cambio de día de los encuentros, pero promete volver el próximo. Y otro tanto, tal vez, pase con Martín.
Tuvimos un potente programa de lectura que pudimos cumplir en tiempo y forma, tal es así que el año que viene los talleristas quieren más lecturas. Resultó Poe ser muy movilizador y como dicen en la UBA se ejecutó "la maquinaria Poe": su presencia se mantuvo durante todo el año dando brío a todos los textos. También fue de gran aporte la presencia fuerte que tuvimos este año de materiales teóricos de crítica y análisis literario que le dieron más vuelo a las devoluciones y a las apreciaciones del propio trabajo de cada tallerista. Kartun nos ofreció su aparatología de montaje de obra, Raquel sus generosas palabras en su visita al taller, James no funcionó tanto como yo esperaba pero seguramente está horadando en las profundidades, los autores realistas contemporáneos aportaron lo suyo y terminamos con el archi-súper amado por Silvia (y también por nosotros) de García Lorca que logró, entre otras cosas, que Miriam escribiera un poema en el que brilló.
También cumplimos con nuestros proyectos extras de asistencia al teatro y otros eventos literarios y lo único que nos quedó en el tintero fue el intercambio con el taller de Estela y nuestra publicación que ya muy pronto verá la luz (eso si cumplen con la entrega en tiempo y forma de los textos y podemos abocarnos a la tarea titánica de armado de semejante libro).
Lo único que lamento fue que nuestra artesanal publicación anual salió con una errata en un texto de Valentín y con un error en el prólogo debido a su edición apurada por los tiempos que nos apremiaban. Tirón de orejas para prepararla con más anticipación el próximo año y fruto inesperado: a partir de ahora también saldrá la publicación nuestra en formato digital con el bonus de los textos leídos que siempre nos reclaman nuestros amigos asistentes a las Muestras.

Valentín tuvo un año espectacular y según sus propias palabras en 1948 había anotado en un cuadernito: "hoy empieza la aventura de escribir" y manifiesta que recién ahora está concretando holgadamente ese sueño y se siente poseedor de herramientas que le permiten hacerlo mejor. Piensa seguir escribiendo mucho más y reconoce tomar de la vida toda sus motivaciones para la escritura. Las chicas le agradecen haber aportado al taller la voz masculina y él propone para el próximo año la lectura de autores populares, moción que es alentada por sus compañeras, conformándose un listado de cantautores de rock, tango y folclore. Valentín le agradece al taller el hacerlo sentir vivo y mejor en su autoestima y sus compañeras le agradecen a él su presencia, lo envidian por su enorme producción y destacan la gran evolución que ha tenido en tan poco tiempo. Todas consideraciones en las que coincido plenamente.

Miriam es otra de las talleristas que más ha escrito en el año y destacamos en ella su disfrute frente a todas las actividades, sus lecturas cada vez más atentas y críticas, su facilidad para absorber las indicaciones y sus ganas de experimentación. Ella considera que debe seguir trabajando porque sabiamente se da cuenta de lo que le falta. Nosotros aspiramos a que también se de cuenta de lo que logró y del salto sustancial que hizo con su último poema. En narrativa, por otra parte, ya está pasando de la reflexión a la ficcionalización de sus relatos, con un mayor ahínco en la búsqueda de la belleza de la forma. Ella manifiesta queel taller le cambió el humor y que se siente muy cómoda aquí. Sus compañeros valoran su gran compromiso y el potencial que tiene y que esperamos siga explotando el próximo año.

A Inés, por primera vez, debemos reconocerle que estuvo menos productiva que otros años. Por ello la insto, con cierta severidad, a que no deje pintura ni sus otras actividades porque es una persona que funciona bien bajo presión y si tiene demasiado tiempo libre lo desperdicia. Sus compañeras saltan enseguida en su defensa hablando de lo poderoso de sus textos y destacan la luminosidad que tienen (y el humor), mal que le pese a su autora que prefiere seguir siendo una cultora del Thanatos. Obviamente, coincidimos que es una persona importante en el taller y que siempre se hace sentir mucho cuando está ausente. Ella remarca que no hizo nada, que no se esforzó, que estuvo muy dispersa y que solo escribió cuando se sintió inspirada. Sabemos que la escritura se trata más de esfuerzo que de inspiración, pero hay años que uno transita con más escucha que palabra, así que un poco la disculpamos y la dejamos que transite su (no tan bien recibido por ella) cambio, al tiempo que le auguramos bellísimos y claros textos (y pinturas) para el próximo año. Silvia le remarca que no tiene que obturar lo que quiere salir.

Nélida ha tenido un año muy difícil, de buscarse a sí misma, motivo por el cual ha estado más retraída y ensimismada, pero aun así ha podido mantener en este espacio que, reconoce, lo permitió conectarse con el mundo. Dice no reconocerse como escritora, sí como escribiente pero le han gustado, afortunadamente, viejos textos suyos que ha encontrado. De eso se trata, evidentemente, de (re) encontrarse. Le gustaron todos los autores vistos y propone más rusos para el próximo año y se autopropone tratar de escribir. Nosotros estamos seguros de que renacerá en textos muy interesantes que se deben estar ya gestando en su interior. Las chicas le remarcan que en lo poco que escribió este año ya se nota una escritura diferente: más fuerte, más comprometida. Y yo me alegro de que de a poco se está animando a sacarse el corset y a escribir sin tanto control. Así que nos preparamos para lo que se vendrá.

A Silvia hay que reconocerle que sigue tan apasionada como siempre en todo lo suyo y que es un motor para le grupo, destacándose este año por sus devoluciones muy críticas y concienzudas. De hecho, reclama el mismo rigor para sus textos. En poesía se nota el trabajo cuidado en cada verso y cómo busca el preciosismo en la expresión. Ella sorprende al grupo diciendo que se siente literariamente pobre y que intentará una poesía más cotidiana y menos lírica. Enseguida es cuestionada por esta decisión, dado el nivel alcanzado en su poesía. Yo estimo que es una búsqueda más y no está mal hacerlo, de hecho su oda al frasco podría estar en ese camino. Veremos que trae el próximo año. También creo que su poesía, por cantidad y estilo, ya está madura para ir pensando en un futuro libro, por lo cual le aconsejo una clínica de poesía. De todas maneras, son decisiones que se toman despacio. Mientras tanto, puede seguir incursionando en su interesante narrativa y realizando otras búsquedas poéticas. Para terminar y dado que le encantó el programa de lectura, reclama mayor cantidad y extensión de textos. Le explico que no es recomendable esa extensión en un taller de escritura, por lo que la invito (y a sus compañeros también) al futuro taller de lectura que daré en el que nos podremos dar esos gustos. Igual insiste con sus propuestas de lectura que, por ser tantas, las mandará por mail.

Satisfechos con la tarea cumplida, a pesar de los problemas de salud que tuvimos varios de nosotros, incluida esta coordinadora, nos despedimos hasta el próximo año que arrancará en marzo con una miniclínica de los textos seleccionados para su publicación.
¡Cuánto trabajo nos espera!

¡Por eso vamos hasta la parrilla a disfrutar de una rica choripaneada que ya está invadiendo con su aroma!

¡Salud y hasta el año que viene!

jueves, 24 de noviembre de 2016

Nuestra muestra de fin de año

Realizamos este sábado pasado la Muestra de Fin de Año del taller. En esta ocasión, era más especial aun que las anteriores porque estábamos festejando ¡¡nuestros primeros cinco años!!
El CMA nos recibió con sus bellas instalaciones.


Nuestros queridos familiares y amigos empezaron a llegar, incluso antes de la hora señalada, pero ya teníamos todo listo para recibirlos, gracias a Ezequiel que nos dio una mano enorme con la tecnología que necesitábamos para tener buen sonido e imagen.







Recibimos a los amigos con una selección de lindos videos musicales y la exhibición de un pequeño museo que recoge las publicaciones del taller y las producciones de nuestros invitados en cada una de nuestras muestras anteriores.


Y a las 18,30 en punto dimos por inaugurada la muestra con Ritualitos, un bello tema que interpretó nuestra querida Nancy Scholz, ex tallerista, invitada como guitarrista y vocalista.





Ritualitos que uno inventa para vivir, dice la canción. Y precisamente de rituales hablé en la apertura y bienvenida.






A continuación, la primera ronda de lecturas:
Valentín rompió el hielo con un poema dedicado a las mujeres y especialmente a su hija.
Siguió Nélida con su relato Juegos y concluyó la ronda Inés, con Depresium, la supuesta lectura de un prospecto médico que explicaría por qué es cómo es.


En la segunda ronda tuvimos a Silvia, que leyó un sentido poema dedicado a su abuela y la siguió Miriam que se lució con la lectura de su primer cuento.

 Luego retomó la palabra Silvia para presentar un bloque audiovisual en homenaje a su amado Federico García Lorca.

Después siguió el turno de los ex talleristas, que fueron invitados especialmente para este festejo. Leyó primero Nancy tres simpáticos microrrelatos, la siguió Julietita con su inquietante “Cristal” y cerró la ronda Orlando, con la narración de Pedro y su maestro.

Luego quise sorprender y homenajear a mis talleristas con un video que recopila lo mucho que hicimos durante estos cinco años.








Y a continuación presenté a nuestras grandes poetas invitadas, que ya nos había acompañado en 2014 y 2016 en el taller cuando leímos, Soñar con agua e Interrumpidas, respectivamente.


















No quería terminar nunca la charla, pero llegaba la hora de dar la consigna para el público e ir a nuestro especial brindis, así que escuchamos un par más de temas en la dulce voz de Nancy y nos fuimos a soplar las velitas.




Después del ágape, algunos valientes leyeron sus heptapoemas y terminamos el encuentro agradeciendo a todos los que hicieron posible que el evento y a todos aquellos que nos acompañan día a día, contradiciendo a M. Duràs y su afirmación de que no hay nadie que soporte a un escritor. Seremos terribles, puede ser, pero queribles también. ¿O no?

Encuentros de noviembre y diciembre

Durante noviembre y diciembre, los encuentros serán descriptos por Nélida, que lo hace así:



Martes 8

Mientras esperábamos a Silvia con aviso de llegada más tarde, estuvimos organizando la muestra de fin de año. Luego pasamos a lectura y análisis de textos nuestros.
En primer lugar leímos un texto mío, "Un viaje en subte", en el que realicé dos diálogos uno real y otro ficticio y mis compañeros debían descubrir cuál era cuál. 
Debo confesar que la única que se dio cuenta del diálogo real fue Verónica , ya que encontró la similitud con la oralidad. Fuimos descubriendo cuál es el lenguaje común en la gente joven: escasez de vocabulario, repetición de palabras, uso de vocablos sobre todo chabacanos. Debo confesar que traté de hacer ambos diálogos bastante similares, para aumentar la dificultad. Verónica me propone transformarlo en un relato. Ya que se trata de un personaje en plena ebullición y podría enfrentarlo con uno que contraste.Veremos el resultado final.
En segundo lugar trabajamos un texto de Valentín: "Jugueteando". Observamos en el texto que aparece una voz inédita en este autor, una voz femenina, diferente a otros textos suyos. Pero sí lo que se remarca siempre es su compromiso con lo social. Un relato tierno, pueril. Miriam habla de cierta complejidad en el vocabulario de algunas frases que no son coherentes con el texto, ya que es una niña la que habla. Valentín dice que lo hizo pensando en su nieta. Tendrá que hacer algunas correcciones y Verónica hace referencia a escritores rusos que hablan de ostranemia, o sea, tener una mirada de niño, borrar la automatización y tener capacidad de asombro. Nos pareció muy acertado el título.
Por último analizamos un texto de Miriam, una poesía sin título. La coordinadora dice que en poesía no es obligatorio un título, la autora no lo encontró y nosotras tampoco pudimos otorgarle uno. En la poesía no queda claro el vínculo que se establece entre los protagonistas. Habla de una relación muy difícil pero llena de lirismo. Verónica le sugiere marcar más el contraste entre las dos personas que intervienen en la relación, para pulir y marcar más el lirismo. Hay un buen final que habla de un buen final para la relación.


Martes15

Todo este encuentro nos dedicamos a preparar la Muestra de Fin de Año para el sábado 19 de noviembre.
Hicimos ensayo de lectura de textos. Nos visitaron ex talleristas para ensayo de sus lecturas también. Ordenamos y plegamos los folletos y nos fuimos distribuyendo y organizando las tareas.
Estuvimos a full, ni siquiera tomamos un café y nuestros invitados se fueron también con la boca seca. Nos desbordó la tarea. Ya tendremos revancha.

Martes 22


Hoy pura alegría y comentarios altamente positivos sobre la Muestra.
Hicimos nuestras críticas, armamos nuevos proyectos, sugerimos modificaciones a la tarea, vimos fotos y videos.
Verónica nos disparó una consigna como tarea para el hogar, ya que nos resistimos a comenzarla en la clase. Estas soldados, estaban cansadas y se rebelaron frente a la capitana.

Consigna: Heptapoemas: son siete palabras que pueden tener un título, pero deben estar en disposición de poema. Debemos escribir por lo menos diez y elegir los tres mejores para llevarlos y continuar con la segunda parte de la consigna.

Para la próxima:

Valentín: Consignas con no y un diálogo.
Nélida: Un relato familiar
Miriam: Lunas
Inés: No avanzar
Valentín: A Federico.


Martes 29

Con la presencia de todos los talleristas,  comenzamos la tarea del día, con el análisis del primer texto, un texto mío llamado " Un relato familiar".
Mis compañeras hablan de un relato en el que se mueve cierta ambiguedad. Ya que si bien se trata de un personaje tragicómico o siniestro, entrega algo a cambio de lo que recibe, esto lo estaría rescatando .Es un misterio su vida y con ese mismo misterio se llega hasta el final de la narración. Verónica dice que le gustó la narración, que hay una mirada de niña en la historia pero con el vocabulario de un adulto. En la historia se evoca un relato de mi infancia. Gustó la rica descripción del personaje y la coordinadora dice que es como un pope ruso (figura sacerdotal antigua) y que es un texto que remite a otra cosa, como el personaje de "Ceremonia Secreta" de Marco Denevi . Hay tabúes que no son hablados y me sugieren un cambio de título, además de correcciones de estilo y sintácticas.
Seguimos con un texto de Inés "No avanzar", la autora pregunta por un cambio de título a la que todas respondemos que no es necesario ya que hay una gran resignificación de la señal de no avanzar en su narración . Silvia le dice a la autora que ve como muy rumiante su reflexión y Valentín habla de una corrección sintáctica. Verónica habla de un texto simbólico que está atravesado por el sujeto.
Luego analizamos otro texto de Inés, un poema titulado "No".
Excelente poema del cual se rescatan tres poemas en uno. El primero que remite a Idea Vilariño, el segundo a Alejandra Pizarnik  y la mezcla de los dos a Gelman, ya que incluso introduce las barras en la escritura como el poeta. El poema habla de una angustia contenida (el no ser). Además comienza y termina con el mismo verso, lo que refuerza su sentido. Aparece en Inés una vena poética que es necesario explotarla anuncia la coordinadora.
Luego vimos un texto de Valentín "A Federico". Silvia habla de una introducción excelente, ya que le brinda un homenaje a Federico García Lorca, rescatando lo fundamental de su vida y de su obra. Además dice Silvia, nada que agregar al poema, solo un abanico, por lo osado y erótico de sus versos. Verónica habla de un muy buen final a diferencia de otros versos, en los que abundan los clishés. Agrega que hay erotismo explícito y que responde al epígrafe.
Terminamos con un poema sin título de Miriam, también inspirado en Federico G. Lorca. Tiene un ritmo que se escucha. Yo agrego que lo que le falta es una guitarra ya que suena como el cantejondo.  Verónica habla de que es muy fuerte al principio y que es necesario reformular el final. Además elogia su escritura, ya que ve en ella, una gran evolución en relación a otros escritos.
Miriam dice que el día que trabajamos a Federico llegó muy inspirada a su casa y se puso a escribirlo. Su poema tiene de Federico desde lo temático y además se refiere también a su infancia. Muy lindo poema, fue elogiado por todos nosotros.
CONSIGNA: De los heptapoemas escritos y leídos por nosotros, luego del análisis de los textos, traer tipeados tres y elegir un cuarto que pensemos le falte trabajarlo.

Para la próxima releer los textos de Valentín que faltaron analizar.

Martes 6 de diciembre
Mientras esperábamos a Silvia, que más tarde nos avisó que no vendría, ya que no se sentía bien, nos pusimos a organizar el asado de fin de año distribuyéndonos las tareas y comestibles a llevar.
Comenzamos con el análisis del primer texto de Valentín: “Consignas con”.
Luego de hacerle algunas correcciones de estilo y sintácticas, arribamos a la conclusión que su texto no era literario sino más bien un texto de opinión, salvo por una pregunta final, dice Verónica, que habilita a pensar en el parlamento de un personaje.
Seguimos luego con “Diálogo”; también del mismo autor. Un diálogo que nos gustó mucho a todas nosotras, pero que tenía que hacerle varias correcciones sintácticas. Verónica dice que ese diálogo puede dar mucho más y se puede transformar en un cuento o un relato. Se encuentra en el mismo una tensión latente que puede explotar. Valentín argumenta que corregirá ambos textos y que seguirá aprendiendo.
La temática del diálogo dio para hablar de Violencia de género, conflictos de pareja, uso de los hijos en la relación de los padres, etc.
Un tercer texto de Valentín: “Consignas con no”. Son muy interesantes todas sus frases pero no le vemos una unión o hilo que las conecte, ya que no responden a un único tema. Habría que reordenarlas para conseguir una unidad. Nos gustó mucho el final.
Valentín tendrá varias tareas para sus vacaciones.
Luego trabajamos con los heptapoemas. Cada uno leyó los heptapoemas traídos y juzgamos entre todos cuál considerábamos el que necesitaba modificaciones o retrabajarlo.  Verónica tipea estos heptapoemas de cada uno, mientras nosotros tomamos el café. Luego ella tomará su café y los que trabajaremos seremos nosotros.

Consignas:
1)Se debe intervenir el texto del compañero de nuestra derecha, cambiando el orden, la estructura o las palabras (en este caso se pueden modificar hasta tres, ya que debe permanecer una mayoría de palabras de su autor original). A pesar de todos los cambios efectuados, debe seguir siendo un heptapoema.
2)Se rotan las hojas y se debe volver a intervenir sobre los poemas, escribiendo  un tercer heptapoema. Se pueden utilizar elementos del primero y del segundo, mantener o modificar intervenciones anteriores, la idea es “retocar”, pero siempre debe mantenerse al menos cuatro palabras del poema original.
3)Por último una cuarta y definitiva versión estará a cargo de su primer autor que deberá evaluar qué hace con las intervenciones de sus compañeros: ¿las acepta?, ¿las redefine?, ¿las incorpora?, ¿las descarta? , ¿las vuelve a intervenir?.
Nos encantó la tarea, nos reímos mucho con las modificaciones, ya que era intervenir en el cuerpo del trabajo del compañero. El resultado nos pareció altamente positivo. Los heptapoemas quedaron mejor que los originales.
Ya nos despedíamos y Valentín nos pidió leer un texto suyo, un texto muy contestatario, con alto contenido social, que nos hizo reír y pensar a la vez. Se lo solicitamos, así que tendrá que traer una copia para cada una.
Y por último, nuestra muy querida escribiente Inés, nos regaló a cada uno, una copia de un texto suyo llamado: “Despedida del taller 2016”. Hermoso texto que nos hizo emocionar, abrazarla y agradecérselo y esa fue nuestra única devolución.
Para la próxima Evaluación Final y adiós al 2016.
Nos veremos en el 2017, los mismos y ¿¿¿algunos más????

jueves, 3 de noviembre de 2016

Encuentro del 1 de noviembre: Federico García Lorca


¿Qué nos pasa con los poetas amados? Eso es lo que me preguntaba durante el desarrollo de este particular encuentro.
Federico fue amado por todos en vida y siguió siendo amado después. Desde pequeños alguna maestra, algún manual nos hizo llegar alguna copla, algún romance y ya está la magia consumada.

La Tarara, sí; 
la tarara, no;
la Tarara, niña,
que la he visto yo.

Apenas treinta y ocho años lo dejaron vivir y su voz, su música tiene una fuerza y una identidad que aún deslumbra, que aún denuncia. ¿Qué otra cosa debe hacer un poeta que cantar y denunciar?
Pero resulta que en el taller tenemos a la amante número uno del español, la que lo ama incondicionalmente desde siempre, la que le puso Federico a su hijo en honor al granadino.
Así que n o fue casual que por primera vez en el año, Silvia, de quien hablamos, llegara al taller un minuto antes de hora. Y vino embalada. Y vino acompañada de los tomos correspondientes de las obras completas, todos marcados, como debe ser: apropiados, lectura fagocitadora.
-¡Góngora! El año que viene tenemos que ver a Góngora porque… blablablá.
Lamenté tener que interrumpir el amor, pero teníamos que corregir nuestra próxima publicación y acordar algunas cosas importantes antes de nadar en las aguas poéticas de Lorca.
Una vez finalizadas estas cuestiones, le dimos la palabra a Silvia que con pasión y conocimiento nos habló de las conferencias, las que considera fundamentales para entenderlo.
Y coincido. Aunque habitualmente le damos a los autores una autoridad relativa respecto al análisis de su propia obra, en el caso de Lorca, por lo que podemos ver en sus conferencias, se arremangaba –tal como hacemos nosotros en el taller- y empezaba a desmenuzar sus textos. Hablaba con conocimiento y desde el quehacer. Aquí las linkeo para que las puedan disfrutar
Silvia continúa hablando y de a poco los demás pueden tomar la palabra. Todos advierten que en Poeta en NY su poesía cambió, su estilo es diferente. Y además no es lo que estamos acostumbrados a leer de él. La crítica coincide en decir que es lo más elevado de su producción y yo no puedo dejar de preguntarme cuánto más pudiera haber evolucionado si alcanzó tal punto con apenas treinta y un años.
A pesar de la dificultad que entraña Poeta en NY todos comienzan a analizar esto y dejamos los romances y el cante jondo para más adelante. Valientes mis talleristas.
Nélida confiesa cuánto la ayudó el estudio preliminar que tiene su edición del poemario e Inés asegura que le resultó más bello que su anterior producción. Por supuesto no pudo dejar de mencionar la Oda a Walt Whitman (su amado) y Miriam rescató la enorme crítica que está presente en todos estos poemas. Valentín, por su parte, remarcó la presencia de la debacle del 29 y yo les leí un fragmento de una carta en la que manifiesta su desazón frente a la crisis de Wall Street y el fragmento de otra de antes de arribar y que demuestra como su proyecto poético viraría al encontrarse con esa realidad. Coincidimos todos en cómo la voz subjetiva y diferenciada del poeta, muta en la gran ciudad hacia el anonimato y la denuncia.
Silvia menciona luego la gran metaforizaciòn lorqueana y rescata también su prosa, la que considerada codeada con el verso. Mencionamos también algunos aspectos de su simbología.
El tiempo se nos acaba, ni un café tomamos, ni una pausa hicimos.
Cada tallerista lee algunos versos y llega la hora de la consigna, muy amplia esta vez:
Escribir a la manera de Lorca, ya sea desde lo temático o desde lo formal: al estilo de cante jondo, de los romances o de sus poemas neoyorquinos.

Nos vamos porque nos tenemos que ir, pero en el aire queda todo lo no dicho, la sensación de haber hablado mucho pero no apresarlo nunca. Y es que es así, su poesía se va en los rasguidos de una guitarra, aunque se quede repicando dentro de nosotros.

martes, 11 de octubre de 2016

Encuentros de octubre

Continua Miriam contando nuestros encuentros:

Encuentro del 4 de octubre

 Trabajamos nuevamente en la organización de la Muestra de fin de año, también en decidir la salida al teatro para ver  Los mil Federicos.
Comenzamos a analizar Disputas, de Nélida. Silvia no lo ve como una pelea por dolor, sino un reclamo de amor y piensa que debería cambiar el título, es el cuestionamiento universal del dolor, coincidimos en que son diferentes maneras de duelo. Verónica habla también del cambio porque éste restringe el significado de la poesía, hay múltiples lecturas que se funden al final.
Continuamos con Papa y huevo, de Silvia. Nélida habla de un título engañoso que sirve perfectamente a la historia. Dos personas tristes, lastimadas. Encontramos dos tiempos en el cuento. Verónica dice que el clímax se comprueba al final (violencia doméstica), relatado en segunda persona, resignifica el lazo de cariño entre Rosi y la narradora, quien se limita a funcionar como centinela. Se hacen correcciones estructurales. Silvia nos cuenta que es una historia real, cercana.
Continuamos con Todo, de Valentín, en el que valorizamos el círculo de la vida relacionado con el renacer de las plantas y, principalmente, con el “estamos aquí, hoy”. Silvia dice que, manteniendo la estructura, se pueden cambiar ciertos clisés, difícil trabajo con estructura existencialista. Verónica indica ciertos cambios, que Valentín decidirá hacer o no.
Leemos  “Un poco más”, diálogo de Inés. Silvia, (también), le cambia el título por “Montón de nada”. Buenísimo, excelente trabajo en una sesión entre paciente y terapeuta. Verónica habla de lo que se considera la labor del artista, se da tiempo para su “momentánea inspiración, se pide un marco mayor para el comienzo y empalmar con otros textos de Inés, por eso trabajaremos Depresium para el próximo encuentro.
Así como:
Consignas, Silvia
Consignas, Miriam
Una ternura de escuela, Nélida
Para Silvana y Amistades, Valentín ( segunda versión)


Encuentro del 11

Comenzamos el encuentro relatando el homenaje realizado el anterior sábado a la escritora Alejandra Pizarnik. Inés nos cuenta que fue muy concurrido y nuestra compañera Silvia participó con una de sus poesías. Leeremos Lorca el primer martes de noviembre. “Poeta en Nueva York” y algo seleccionado del Romancero, que Verónica nos hará llegar. Nuestra lectura comienza con Depresium, de Inés. El texto no responde completamente a la consigna (aunque sí lo hace al final). Observamos que mezcla la definición del narrador y su excesividad de tomar remedio, y lo comparte con el lector, se agregan momentos de enunciación de la narradora. Inés decide reformular el texto. Leemos luego mis consignas. Respecto a la primera, fue leìda como la definición de un personaje entrometido, mal pensado, sin vida propia. Las frases delinean un personaje que puede ser utilizado en un texto. En la segunda consigna que se debìa definir qué diálogo transcripto era el verdadero, logrè verosímilitud en ambos. Las consignas de Valentín nos llevan a observar que es la segunda opción presentada la que definía Vivi, su personaje, y no en la primera serie, ya que ahì eran frases dichas para otro. Verónica le sugiere reescribir las frases tal cual son dichas (en estilo directo, para saber còmo habla el personaje), luego podrà incluirlas en una historia. En la resoluciòn de la segunda consigna, nuestro compañero no escribiò estrictamente un diálogo sino que relata las situaciones, ambas son imaginarias. Vero dice que ambos textos son interesantes y podrían ser parte de una creación en serie de distintas “Noches de amor”. También trabajamos la segunda versión de “Para Silvana”, nos gustó más con las correcciones realizadas. Para termnar, leímos la segunda versión de”Amistades”, se hicieron correcciones de forma y gramaticales. Después se leyó “Todos los No”, de A.M Shua. De allí salen las consignas. 1.Escribir un texto poético, a la manera de Shua 2-Escribir un texto narrativo que comience y termine con la palabra NO. 3-Escribir un diálogo en el cual todas las intervenciones de uno de los personajes comience con la palabra NO Para la próxima
Consignas, de Silvia, 
Una ternura de escuela, de Nélida,
Cajita feliz, de Valentín.


Encuentro del 18



Hoy nos hallamos otra vez organizando la muestra, se espera respuesta de la Municipalidad y Mirabeles, pensamos en tercer o cuarto sábado de noviembre.
Comenzamos con Una ternura de escuela, de Nélida. Silvia considera genial su título, totalmente irónico. Nélida lo cuenta como triste experiencia, Verónica sugiere intercalar las frases que dice el personaje con las intervenciones del narrador, para lograr una retroalimentación mutua.
Continuamos con Consigna, de Silvia, en la que describe a un personaje que sólo quiere y considera a su familia y amigos (círculo chico), más allá una violencia inmanejable. Prototipo de “clase de mierda” (Kartum), estereotipo real que pulula desde hace mucho tiempo en nuestro país.
Leemos “Cajita feliz” de Valentín. Relato actual en el que  el narrador reivindica las clases sociales postergadas, Silvia dice que pivotea entre lo irónico y la verdad absoluta del relato, texto duro entre ficción y realidad, de alto nivel narrativo, registro culto y lenguaje formal que refuerza el sentido de la historia. Valoramos el conocimiento de los diferentes textos que escribe, en los que utiliza un lenguaje técnico-profesional, específico de la actividad que realizan esos personajes.

Para la próxima:

Importante: Seleccionar textos para la publicación y lectura en la muestra.

El frasco, Miriam y Valentín.
Relato familiar y El juego, Nélida.
Consejos, Miriam.
Jugueteando, Valentín.

Encuentro del 25

Comenzamos a organizar y decidir como encargar las invitaciones, elegimos diseño en blanco y negro. Verónica nos describe el lugar que nos cedió el Centro Municipal de Artes, se organiza la música y la comida.
Seguimos con la selección de los textos para la publicación, leemos El frasco, de Valentín y el que escribí. Tratamos de elegir las producciones para publicar y también, para leer en la Muestra, dejamos que Verónica los ubique de acuerdo al espacio de la publicación. Debemos mandar los textos para publicar por mail.

Leemos El juego, de Nélida, hermosas imágenes sensoriales, un volver a la niñez, muy nostalgioso, es una explosión de colores y sentidos.
Luego trabajamos mi texto, Consejos, las revelaciones de una madre que reconoce su error al final.

Para la próxima:


Ir preparando la lectura de Lorca, asegurar la elección de los textos para leer en la Muestra.

Encuentro del 27: Realistas x3: Blaisten, Castillo y Shua

Para ponernos en clima, vimos este corto sobre el cuento de Abelardo. No se cuida mucho la estética, pero sirve para recordarnos el argumento.

Ya estábamos en condiciones de empezar a analizar “El marica”, el cuento de Castillo. Lo relacionamos con “La mamà de Ernesto”, otro de sus cuentos que leímos en años anteriores y que al parecer les gustó más a los talleristas. Vislumbramos en ellos el tema de la traición, de la amistad, de los códigos masculinos y valoramos aquí más la forma narrativa que el contenido.
Para mi sorpresa, decidieron pasar rápidamente al cuento de Ana María Shua, que fue el que más les gustó. Destacaron la verborragia de su protagonista, la utilización de un registro oral y coloquial muy logrado y la gran verosimilitud de la situación inicial, del personaje y de su historia. Aproveché para remarcarles cómo la situación de enunciación (la sesión de depilación) funciona como un leit motiv que permite un uso magistral del tiempo de la narración, que se verá permanentemente interrumpida por más de un tiempo pasado que irrumpen en ese presente. Las chicas destacaron la simbología del color de los malvones, la inadaptación de esos inmigrantes y el deseo de arraigar, como las plantas. También observaron la importancia de la figura de la madre que le permite a la narradora contar su propia vida en retrospectiva.
Para finalizar nos fuimos a Blaisten y su particular humor en “El tío Facundo” y esos personajes estereotipados que no se permiten el placer y solo lo harán cuando aparezca Facundo en sus vidas, por eso luego habrá que matarlo. Valorizamos aquí la estructura narrativa y yo les marqué (una vez más porque son duros de convencer) el uso diferenciado e irónico de los clisès y lugares comunes con los que Isidoro presenta a sus personajes. También recordamos los cuatro elementos que generar el humor: el absurdo (situación disparatada), la parodia (imitación burlesca, homenaje), la exageración (sobredimensionar) y la ironía (expresar burlonamente lo contrario de lo que se quiere comunicar). Notamos en este texto presente tres de estos elementos, pero no la parodia. Sin embargo, mientras tipeo este post, pienso en la forma elegida para ocultar el cadáver del tío Facundo y no puedo dejar de pensar en Poe, así que creo que este autor se divirtió de lo lindo creando este cuento y se permitió además, homenajear de esta manera al gran maestro del fantástico.
Para finalizar dos bellas consignas, que más que consignas son ejercicios para futuras escrituras:
1-      Definir personajes (y si se desea indagar en uno mismo también) a partir de lo que dicen, listando sus frases
2-      Transcribir un diálogo escuchado en la realidad lo más literal que se pueda y presentarlo junto con otro diálogo ficticio (La idea en el próximo encuentro es descubrir al verdadero).

Para la próxima, textos de los talleristas.


¡Nos vemos!

martes, 20 de septiembre de 2016

Encuentros de septiembre, por Miriam

Encuentro del 6

¡Qué año venimos teniendo en El escribiente! Salvo los jóvenes incorporados este año, todos los veteranos tuvimos inconvenientes de salud y otras yerbas.
Ahora le tocó el turno a Inés que fue arrojada de bruces al piso por el viento ciclónico de Buenos Aires, resultado: muñeca con posible quebradura. Más las inasistencias programadas, debimos suspender el encuentro del día.

Los siguientes encuentros los relata Miriam así:

Encuentro del 13

Recibimos felices a las enfermitas y accidentadas de la semana anterior.
Organizamos la lectura de este mes; son cuentos realistas: “ El tío Facundo”, de Isidoro Blaisten; “El marica”, de Abelardo Castillo; “ La vida y los malvones”, de Ana María Shua y agregaremos “La mamá de Ernesto”, de Abelardo Castillo, para los que no lo leímos en años anteriores. Se recomienda la lectura de “Que tengas una vida interesante”, de Shua, del cual extrajimos el cuento mencionado de esa autora.
Valentín comenta que es posible usar el lugar que eligió para nuestro encuentro de fin de año, invita a Verónica a conocerlo. Se insistirá con Avellaneda edita, mientras continuaremos haciendo correcciones. Proyectamos en armar el libro durante el próximo mes de marzo.
Comenzamos a trabajar con La vida de Ana, no concuerdan con el planteo del personaje de Juan. Inés cree que es un estúpido. Se habla del logro de cambiar la perspectiva de los distintos personajes, se modifican ciertas estructuras.
Leemos De patios y malvones, enfocamos la claridad del texto, Inés se ofrece a regalarle un patio a Silvia (la autora), yo indiqué que me encanta cómo le habla a su interlocutor, Valentín quiere reivindicar los malvones al lado de las otras plantas. La frase de Shua se encuentra exactamente insertada en su historia. El lenguaje es apelativo, implicada en los suyo, lo plantea como monólogo interior, aparece el fluir de la conciencia. Verónica indica no usar punto y aparte, sólo en el último párrafo. Silvia cuenta que se expuso en el texto.
También leemos Quimera, se le indica a Valentín (su autor) despersonalizar para darle aún más fuerza a la temática, él decidirá la modificación de algunas estrofas.
A continuación leemos “Al fresno”, de Silvia, valoramos las metáforas y la duda creada entre el yo lírico y el fresno u otra persona, es una fiesta de todos los sentidos, la conjunción del árbol y el yo lírico. La autora cuenta que es un encuentro, muy trabajado.
Quedan para la próxima:
-Retrato, de Inés
-Desenlace y Dialogando, de Valentín
-Conversaciones con Isabel y Viejos amores, de Miriam


Encuentro del 20

Comenzamos con la lectura de El retrato, de Inés, en el que valoramos la manera de mezclar los tiempos de la historia, aunque no encontramos identificación con los distintos personajes. Valentín dice: “nadie se jugó por esta piba”. Encontramos una conexión con Onetti, coincidimos en que el final es bellísimo.
Continuamos con Desenlace, de Valentín y aquí nos llama la atención la forma de presentación: es un texto narrativo que forma un rombo, como si fuera un caligrama. El texto nos complica, encontramos dos triángulos entre personajes, estamos en presencia de algo muy original. Silvia dice: “Son las nuevas generaciones”, Valentín acota: “degeneraciones”. ¿Estamos en presencia de un nuevo género?
Leemos Viejos amores, de mi autoría, y en él criticamos los primeros versos, la poesía toma contundencia con el recorrido del poema, lo despojado de las últimas estrofas deja entrever el final.
En Conversaciones con Isabel, también mío, cuesta ver quiénes son los personajes, se conviene en que son datos muy técnicos, la historia no termina, no se resuelve, puede ser material para otro texto, germen de algo más complejo.
Por último, Dialogando, otro texto de nuestro compañero. Un dialogo enmarcado, muy logrado en fondo y forma, la temática da para continuarlo, ya vemos un estilo en los personajes de Valentín, el marco político se va afianzando, marcando en este caso, pluralidad de voces. Muy buen final, se hacen ajustes en la narración, texto tramposo que juega con las formas: diálogo, narración, texto periodístico.
Para la próxima: lectura de los tres cuentos de nuestros autores consagrados: Castillo, Shua y Blaisten.

¡Esperamos a Nélida!

Encuentro del 30 de agosto

Con mucho frío y solo tres valientes talleristas tuvimos nuestro encuentro del 30 de agosto.
Analizamos los tres poemas de Miriam
y el poema que Valentín le dedicó a Silvana, luego supimos que es el nombre de su hija.
Aprovechamos la tarde para trabajar con un texto de Borges, dialogo sobre dialogo y unos poemas aborígenes de las dos puntas del continente: comanches y yamanes.
La consigna fue:
1-      Traducir los poemas otorgándoles sentido
2-      Escribir un texto narrativo a partir del texto de Borges
Aquí el link con los textos.

Para la próxima tenemos:
-Al fresno y Malvones, de Silvia
-El retrato, de Inés
-Quimera, de Valentin
-La vida de Ana, de Miriam

¡Nos vemos!

Encuentro del 23: Henry James y su novela Washington Square

Encuentro del 23 de agosto

Con la ausencia de Nélida que sigue disfrutando de las playas cálidas del Brasil, nos encontramos para compartir la lectura de Henry James (1843-1916).
Para ponernos en clima vimos fragmentos de dos películas en las que Hollywood llevó a escena esta novela.



Necesariamente nos tuvimos que remitir al contexto de producción de sus obras, dado que como postula Costa Picazo y otros críticos, James escribe desde una perspectiva europea, de mucha critica a su Estados Unidos de origen y en un momento en que la relación entre Europa y América era tanto de atracción como de repulsión. Por eso no es casual que el tema internacional esté tan presente en sus obras: el contacto entre el estadounidense y Europa, la idea del americano como bárbaro en contraposición con el refinamiento y la cultura del Viejo Mundo.
Recordamos que fue un neoyorquino educado en Ginebra, Paris, Londres y que enarboló la figura del hombre internacional, culto y refinado pero nunca dejó de ser un exiliado en ambos continentes.
Con esta introducción, nos abocamos de lleno a Washington Square, la novela que leímos, situada en frente de una plaza, en el mismo lugar que el autor vivió, aunque ambientada  unos treinta años antes.
Esta novela está presentada casi como un melodrama y lo más interesante es la forma de contarla antes que su contenido. Sin embargo, no deja de ser controversial la descripción de sus personajes. A Valentín le llamó la atención el padre de Katherine, al que calificó como un jugador de ajedrez. Inés se focalizó más en la relación padre-hija, siendo esta última la que no cumple con las expectativas de su progenitor. Miriam, compadecida de ella, dice que lo único que quería era agradarle al padre. Pero intuye que el narrador luego “explicará” por qué actuaron así los personajes (lo que nos da pie para hablar en el taller del multiperspectivismo jamesiano). Silvia, por su parte marca el desamor absoluto del padre y el abuso de poder que ejerce manejando el dinero. Comparamos la actitud de Katherine con la de Nora, el personaje de Ibsen, que fue mucho más radical en su actuación frente a los mandatos sociales.
Marcamos luego el viaje a Europa, con la idea de capitalizar los bienes culturales, más allá de la trama de la novela. De hecho, a mi particularmente me parece funcional, ya que luego de ese viaje, que se prolongó, Katherine vuelve más sabia: sobre el final del mismo descubre el desamor de su padre y al llegar a América descubrirá el desamor de Morris. Al finalizar la novela es una mujer más madura y segura de sí. Algunos críticos señalan que esta novela anticipa el tema de la literatura estadounidense: padres contra hijos, hijos contra padres.
Silvia me pregunta por qué incluí esta novela en el programa y les expliqué cómo James adelanta el multiperspectivimo y cómo bregaba por la autonomía de la realidad en el proceso creativo, anticipándose también al formalismo ruso y el estructuralismo.
Así que les insistí: lo más interesante de este autor es el tratamiento de los diferentes puntos de vista de la narración, por ello la consigna de escritura tiene que ver con eso:

Escribir un texto narrativo en el que aparezca más de una perspectiva del narrador. Pueden focalizar en más de un personaje, renarrando, adelantando, etc.

Encuentro del 23: Henry James y su novela Washington Square

Encuentro del 23 de agosto

Con la ausencia de Nélida que sigue disfrutando de las playas cálidas del Brasil, nos encontramos para compartir la lectura de Henry James (1843-1916).
Para ponernos en clima vimos fragmentos de dos películas en las que Hollywood llevó a escena esta novela.



Necesariamente nos tuvimos que remitir al contexto de producción de sus obras, dado que como postula Costa Picazo y otros críticos, James escribe desde una perspectiva europea, de mucha critica a su Estados Unidos de origen y en un momento en que la relación entre Europa y América era tanto de atracción como de repulsión. Por eso no es casual que el tema internacional esté tan presente en sus obras: el contacto entre el estadounidense y Europa, la idea del americano como bárbaro en contraposición con el refinamiento y la cultura del Viejo Mundo.
Recordamos que fue un neoyorquino educado en Ginebra, Paris, Londres y que enarboló la figura del hombre internacional, culto y refinado pero nunca dejó de ser un exiliado en ambos continentes.
Con esta introducción, nos abocamos de lleno a Washington Square, la novela que leímos, situada en frente de una plaza, en el mismo lugar que el autor vivió, aunque ambientada  unos treinta años antes.
Esta novela está presentada casi como un melodrama y lo más interesante es la forma de contarla antes que su contenido. Sin embargo, no deja de ser controversial la descripción de sus personajes. A Valentín le llamó la atención el padre de Katherine, al que calificó como un jugador de ajedrez. Inés se focalizó más en la relación padre-hija, siendo esta última la que no cumple con las expectativas de su progenitor. Miriam, compadecida de ella, dice que lo único que quería era agradarle al padre. Pero intuye que el narrador luego “explicará” por qué actuaron así los personajes (lo que nos da pie para hablar en el taller del multiperspectivismo jamesiano). Silvia, por su parte marca el desamor absoluto del padre y el abuso de poder que ejerce manejando el dinero. Comparamos la actitud de Katherine con la de Nora, el personaje de Ibsen, que fue mucho más radical en su actuación frente a los mandatos sociales.
Marcamos luego el viaje a Europa, con la idea de capitalizar los bienes culturales, más allá de la trama de la novela. De hecho, a mi particularmente me parece funcional, ya que luego de ese viaje, que se prolongó, Katherine vuelve más sabia: sobre el final del mismo descubre el desamor de su padre y al llegar a América descubrirá el desamor de Morris. Al finalizar la novela es una mujer más madura y segura de sí. Algunos críticos señalan que esta novela anticipa el tema de la literatura estadounidense: padres contra hijos, hijos contra padres.
Silvia me pregunta por qué incluí esta novela en el programa y les expliqué cómo James adelanta el multiperspectivimo y cómo bregaba por la autonomía de la realidad en el proceso creativo, anticipándose también al formalismo ruso y el estructuralismo.
Así que les insistí: lo más interesante de este autor es el tratamiento de los diferentes puntos de vista de la narración, por ello la consigna de escritura tiene que ver con eso:

Escribir un texto narrativo en el que aparezca más de una perspectiva del narrador. Pueden focalizar en más de un personaje, renarrando, adelantando, etc.

jueves, 18 de agosto de 2016

Encuentro del 16 de agosto

Mientras esperábamos a Silvia, empezamos a pensar en el lugar que sería el indicado para nuestra muestra anual, dado que este año ¡cumplimos cinco añitos! Nos queda de tarea ir buscando opciones.
Luego analizamos “La ventana”, un interesante cuento de Miriam, producto de la unión de un par de consignas y en el que su protagonista se permite la esperanza del amor. Tiene un cierre al ritmo del dos por cuatro.
Seguimos con “Vacío”, de Inés, en el cual la narradora se identifica con un frasco que no es elegido en una exposición. Con lirismo, acidez y “al desnudo” logra su autora transformar ese simple suceso en un cuento muy bien estructurado.
Continuamos con un cuento de Valentín, “Amistades”, que casi parece un decálogo sobre la amistad. Sobre la amistad entre varones, agregamos, ya que la femenina tiene otros ribetes. Silvia rescató del cuento sus elipsis y la denuncia social que tiene implícita.
Finalmente les tocó el turno a dos poemas de Silvia. En “Obrera”, el más subjetivo porque está dedicado a su abuela, sorprende con el final y, si bien es narrativo, el ritmo y las metáforas le dan el lirismo necesario. En “Intento” notamos mayor lirismo aun y es un poema de buena hechura, con un estribillo que refuerza el ritmo y lo semántico. Ante la duda de su autora respecto de si lograba transmitir enojo, destacamos la abundante (y funcional) aliteración de la R y el campo semántico de la bronca.


Nos despedimos, contentos por la tarea realizada, hasta el próximo martes en el que leeremos la novela de Henry James, Washington Square.

lunes, 15 de agosto de 2016

Encuentro del 9: ¡Nos visita Raquel Fernández!

Hoy tuvimos la alegría de recibir en el taller a la poeta Raquel Fernández. Silvia la recibió con un afectuoso abrazo y al grito de “mi poeta favorita”, así que sin mediar más presentaciones nos pusimos enseguida a hablar de poesía y sus alrededores.
Raquel nos contó de que acaba recientemente de terminar su último trabajo que gira en torno a poetas suicidas y hablamos acerca de su prolífica producción y cómo se le ocurren los poemas en serie. Más adelante nos dirá que al comienzo escribía poemas sueltos, peor a esta altura del camino ya es más habitual que se le ocurran de manera seriada.
También hablamos de la falta que hay en Avellaneda de un lugar destacado para la literatura contemporánea de calidad y cómo cuesta ingresar en diferentes instituciones vinculadas a la escritura. Ahí reconocimos el valor del Café Literario La palabra que sana que coordina aquel junto a Claudia Vázquez todos los segundo sábados de cada mes. Un espacio pensado para darle cabida a autores locales.
Pasamos luego a hablar de las vicisitudes que conlleva el arduo proceso de la edición y la posibilidad que brindan algunos concursos literarios que nos recomendó.
Abordadas estas cuestiones laterales, nos abocamos un poco más a su poesía y le comentamos qué material suyo habíamos leído en el taller y cómo valoramos su escritura. Aquí mencionamos la valentía que tiene a la hora de mezclar vocabulario informal, coloquialismos que lindan con lo soez en un poema lírico de fuerte metaforizaciòn. Y ella nos confesó que llega un momento de la vida /de la escritura en que uno se pregunta: “¿Qué te interesa más, lo que vos querés decir o lo que los otros digan de vos?”
Raquel escribe para ella y con más de cien premios ganados ya no necesita agradar a ningún jurado más.
También hablamos de su libro Hermano, escrito desde el dolor de su pérdida y reconoce que hoy lo escribiría distinto, lo que nos hace reflexionar sobre la implicancia de la subjetividad de la escritura y la importancia de darle a leer a otros o dejar reposar los textos para poder evaluarlos más objetivamente.
No podía faltar la mención de Alejandra Pizarnik y nos recordó La bucanera de Pernambuco, un texto en el que la gran poeta utiliza un lenguaje soez y explicito. Así arribamos al concepto de “incomodar”, algo que debería ser el leiv motiv de la literatura.
Pasamos a pensar, merced a otra de las preguntas de Silvia que no se cansaba de indagar a su ídola, cuáles son las motivaciones internas al momento de escribir y cómo nos desprendemos luego de esos dolores. Raquel nos contó que cuando escribe para Chica posmo es precisamente un escape, una fuga a tanta oscuridad de algunos de sus poemarios.
Esta vez tomamos poco café, nada de licor; parece que nos embriagaba Raquel y ya pasada la hora seguíamos preguntándole cosas y escuchando sus sentencias: “Me interesa más el fondo que la forma”, “El texto se tiene que sostener solito”, “No hay que alejarse de la gente”, "En narrativa una buena historia es fundamental” y la que más me gustó: “Ahora me doy permiso y escribo como quiero”.
Y de eso se trata la buena literatura, de escribir lo más genuinamente que podamos
¡Gracias, querida Raquel Fernández, por visitarnos y compartir con nosotros tus experiencias de vida y tu palabra!

viernes, 5 de agosto de 2016

Encuentro del 4 de agosto: evaluaciòn

En nuestro nuevo horario de los martes, retomamos nuestros encuentros post vacaciones, con la ausencia de Laura y la demora de Valentín, ambos por cuestiones médicas. Así que en primer lugar les pedí disculpas a mis talleristas por las molestias ocasionadas con el cambio de horario y agradecí infinitamente los ajustes que hicieron para que pudiéramos todos continuar embarcados en El escribiente, principalmente a Laura que pospuso otra actividad que realizaba en el mismo horario.
Mientras esperábamos, y para reactivarnos después del descanso, empezamos con una consigna de escritura de presentación:
-Escribir un texto autobiográfico que se ajuste a uno de estos formatos:
a)el trailer de una película de acción
b)una serie correlativa de imágenes
c)una receta de cocina
d)un prospecto médico
Fue muy graciosa la resistencia a empezar escribiendo que pusieron, pero lentamente  comenzaron a hacerlo y con resultados muy alentadores. ¡No poco fue lo que nos reímos cuando le tocó a Inés el turno de leer sus producciones y Silvìa le descubrió el prospecto debajo de la carpeta!

Luego nos dedicamos a la postergada evaluación de mitad del año y el resultado fue altamente positivo; lo más destacado fue la incorporación de los nuevos talleristas que le dio un nuevo brío e identidad al taller.
Silvia se mostró muy entusiasta, como siempre, y agradecida por los nuevos compañeros, evaluó su mejoría para la construcción de metáforas y comentó cierta inquietud que siente al creer que tiene que elegir entre poesía o narrativa, ya que aún percibe que ciertos textos “necesitan” de la narrativa. Le recordé, entonces, que nada la obliga a esa elección; puede seguir cultivando ambos géneros, aunque sus compañeros y yo la reconozcamos más genuina (¿o cómoda?) en su paleta poética. A mí, particularmente, me siguen interesando mucho sus textos narrativos.
Nélida coincidió con Silvia en lo positivo de las nuevas incorporaciones y destacó cuánto le gustaron los autores de este año y el desafío de escribir imitándoles el estilo. Dijo que le sale más el relato, pero le hice notar que sus último textos fueron cuentos propiamente dichos, con un claro conflicto. Y todos coincidimos en que está en un profundo cambio interior y que ya se empieza a ver en su evolucionada escritura.
Siguió Miriam que muy contenta explicó cómo el taller le cambió el humor y cómo superó su sensación de inferioridad al encontrar un lugar en el grupo. Todos revalorizamos la importancia de la heterogeneidad en los grupos y le reconocimos, especialmente, un estilo propio de escritura que es nuevo en el taller. Yo le destaqué el brío con el que desde el comienzo encaró las actividades del taller y su consecuente rápida evolución.
Valentín, que fue el que más produjo en esta primera etapa, también dijo sentirse muy cómodo en el grupo y hallarse dividido entre lo poético y lo narrativo. Esperamos que siga cultivando los dos hasta ver para qué lado lo llevan las palabras. Le hicimos notar cuánto evolucionó en sus devoluciones críticas y cómo comenzó en el último mes  a hablar técnicamente para  tratar de explicar lo que intenta hacer en sus propios textos.
A Inés por primera vez le tuvimos que dar la razón con su “casi nada” y reconocer que, en esta primera etapa, su producción mermó, pero son los gajes del oficio. ¡Por eso le decíamos a Valentín que aprovechara su momento de gran producción! Obviamente ella se sintió conforme con Poe y los demás autores vistos y sus compañeros le hicieron notar que a pesar de pretender seguir escribiendo de manera netamente oscura, aparece luminosidad en sus relatos (en sus cuadros también), así que coincidimos en que está luminosa a pesar de querer seguir siendo oscura.
Martín reconoció haber tenido un cuatrimestre complicado lo que le generó tantas ausencias y discontinuidad en el trabajo. Los compañeros le recordaron que esa discontinuidad también entorpece el trabajo grupal ¡porque se quedan sin sus devoluciones! También expresó su dificultad para sentarse a delinear un cuento y cómo en una hora puede escribir once poemas. A todo le contestamos. “calma”, “om”, la escritura es lineal por eso necesita tiempo, organización, revisión. Lo invitamos a concurrir más regularmente y a sentarse con sus poemas y retrabajarlos. Tal vez escondido en esos once, hay un excelente poema que espera el alumbramiento de este padre comprometido.
Fue una pena que Laura no pudiera llegar para la evaluación e intentaremos en el próximo encuentro dedicarle unos minutos ya que es una presencia valiosa para el grupo.

Mientras que, al igual que los chicos de la escuela, mis talleristas juntaban sus cosas para irse porque se nos había hecho tarde, les dije que estaba muy contenta con el trabajo realizado hasta ahora, cómo veníamos cumpliendo con el programa, las actividades extras que realizamos como la concurrencia al teatro y al café literario, el análisis más profundo de herramientas literarias de la mano de Poe, Barthes y Kartun. También les mencioné todas las actividades que tenemos programada para la segunda etapa y reconocí que por primera vez en estos cinco años me atrasé con algunas devoluciones, cosa que no me reprocharon pero que espero no se vuelvan a repetir.

Muy jocosos y repartiéndose halagos y piropos se despidieron hasta el próximo martes en que tendremos la suerte de ser visitados por nuestra querida Raquel Fernández.

viernes, 22 de julio de 2016

Encuentros de julio

Encuentro del 11

Comenzamos este encuentros organizando varias cosas, como la recuperación del encuentro del 27, acordando el día que nos visitará Raquel, la asistencia como grupo al Café literario este sábado y el envío de los textos por mail para nuestro proyecto del libro. ¡Qué trabajo!
También comentamos la concurrencia al Café literario del sábado pasado en la que todos nos expusimos, incluida esta coordinadora. Reflexionamos sobre la poesía jugada de la payadora erótica, releímos y reímos con sus versos y nos felicitamos mutuamente, ¿por qué no? Broma aparte, ¡cómo cuesta exponer lo propio! ¡No hay duda de que la escritura literario es solitaria y onanista!
Comenzamos analizando "El final", de Inés, en el que volvió a presentar su paleta oscura, con una buena descripción que ambienta las escenas y un final desgarrador. Este texto fue producto de la consigna de las fotos, objetos.
Seguimos con "Rugidos", de Miriam, que lo vimos como un relato romántico, casi una prosa lírica, en el que destacacmos la doble percepción del fenómeno atmosférico: desde el miedo y desde la calma.
Luego fue el turno de Valentín, con "El ganador", en el que volvió a presentar un personaje bien descripto y controversial y un texto en el que aparecen tecnicismos del deporte, terminos eruditos, comparaciones líricas y en el que le pedimos un poco más de coloquialidad. Disfrutamos la discusión acerca de lo que perdió este personaje "ganador". Excelente título.
Finalmente pudimos analizar el poema "Ausencias", de Laura, que había sido postergado varios encuentros. Aquí nos emocionamos y ponderamos el buen ritmo logrado y la temática, que combinó la descripción del padre y lo dejado/legado al yo lírico.

Para la próxima:
El niño del violonchelo, de Nélida
Ella, de Valentín
Consigna, de Miriam
El personaje, de Inés
Una búsqueda, de Nélida

Encuentro del 18

Con las ausencias con aviso de Silvia y Martín, pudimos realizar este encuentro prevacacional y enseguida nos abocamos a las lecturas.
Comenzamos con "El niño del violonchelo", de Nélida, en el que, al igual que en el texto anterior de Valentin, discutimos mucho sobre el accionar del personaje. Yo lo veía como bastante contradictorio, hasta cierto punto ilógico, pero todos trataron de convencerme de que portaba las contradicciones propias del género humano. Tal vez sea yo la que lo tenga que releer una vez más. Pero mi pregunta central era: ¿dónde encuentra el placer ese muchacho, en la música, en el éxito, en el dinero, en el fracaso, en cumplir el mandato paterno, en desobedecerlo?
Seguimos con el poema "Ella", que fue leído como una oda al amor y a la mujer y en el que su autor se permitió emocionarse y emocionarnos.
Continuamos con el texto aún sin título de Miriam en el que cumplió con la consigna de las cartas de Propp y en el que destacamos su final abierto. A su vez reconocimos un nuevo estilo que nos obliga, como lectores, a buscar cómo pararnos frente a él. ¡Lo interesante de que se incorporen nuevos talleristas al grupo!
Inés, que decididamente volvió a su paleta más oscura, nos presentó "El personaje", que al estilo de Poe, es una figura contrahecha desde el nacimiento. La propia autora confirmó luego que lo escribió con la intención de mostrarnos algo terrible, pero sus compañeros rápidamente le retrucaron que aquí aparece un vestigio de luz, una búsqueda y encuentro (luego fallido) de amor. A mí me hizo acordar mucho a "La gallina degollada", de Quiroga, motivo por el cual les dejaré de regalito un video con una adptación de ese cuento.
Terminamos con "Una búsqueda", el otro texto de Nélida, en el que sin golpes bajos habla del robo de la identidad de la última dictadura militar y al que le pedí más abismo; creo que el texto y la temática puede dar mucho más. Los yanquis dirían que le estoy pidiendo a Nélida que salga de su zona de confort y se anime a explorar las profundidades de su personaje, ¿será?

Quedan pendientes para después de las vacaciones:
De Nélida: Disputas
De Silvia: Invento, Obrera, Al fresno, De patios y malvones
De Valentín: Amistades, quimera
De MIriam: Ejercicio, Ventana

¡Disfruten este video, descansen, escriban, lean, sean felices y vivan las vacaciones!