martes, 11 de octubre de 2016

Encuentros de octubre

Continua Miriam contando nuestros encuentros:

Encuentro del 4 de octubre

 Trabajamos nuevamente en la organización de la Muestra de fin de año, también en decidir la salida al teatro para ver  Los mil Federicos.
Comenzamos a analizar Disputas, de Nélida. Silvia no lo ve como una pelea por dolor, sino un reclamo de amor y piensa que debería cambiar el título, es el cuestionamiento universal del dolor, coincidimos en que son diferentes maneras de duelo. Verónica habla también del cambio porque éste restringe el significado de la poesía, hay múltiples lecturas que se funden al final.
Continuamos con Papa y huevo, de Silvia. Nélida habla de un título engañoso que sirve perfectamente a la historia. Dos personas tristes, lastimadas. Encontramos dos tiempos en el cuento. Verónica dice que el clímax se comprueba al final (violencia doméstica), relatado en segunda persona, resignifica el lazo de cariño entre Rosi y la narradora, quien se limita a funcionar como centinela. Se hacen correcciones estructurales. Silvia nos cuenta que es una historia real, cercana.
Continuamos con Todo, de Valentín, en el que valorizamos el círculo de la vida relacionado con el renacer de las plantas y, principalmente, con el “estamos aquí, hoy”. Silvia dice que, manteniendo la estructura, se pueden cambiar ciertos clisés, difícil trabajo con estructura existencialista. Verónica indica ciertos cambios, que Valentín decidirá hacer o no.
Leemos  “Un poco más”, diálogo de Inés. Silvia, (también), le cambia el título por “Montón de nada”. Buenísimo, excelente trabajo en una sesión entre paciente y terapeuta. Verónica habla de lo que se considera la labor del artista, se da tiempo para su “momentánea inspiración, se pide un marco mayor para el comienzo y empalmar con otros textos de Inés, por eso trabajaremos Depresium para el próximo encuentro.
Así como:
Consignas, Silvia
Consignas, Miriam
Una ternura de escuela, Nélida
Para Silvana y Amistades, Valentín ( segunda versión)


Encuentro del 11

Comenzamos el encuentro relatando el homenaje realizado el anterior sábado a la escritora Alejandra Pizarnik. Inés nos cuenta que fue muy concurrido y nuestra compañera Silvia participó con una de sus poesías. Leeremos Lorca el primer martes de noviembre. “Poeta en Nueva York” y algo seleccionado del Romancero, que Verónica nos hará llegar. Nuestra lectura comienza con Depresium, de Inés. El texto no responde completamente a la consigna (aunque sí lo hace al final). Observamos que mezcla la definición del narrador y su excesividad de tomar remedio, y lo comparte con el lector, se agregan momentos de enunciación de la narradora. Inés decide reformular el texto. Leemos luego mis consignas. Respecto a la primera, fue leìda como la definición de un personaje entrometido, mal pensado, sin vida propia. Las frases delinean un personaje que puede ser utilizado en un texto. En la segunda consigna que se debìa definir qué diálogo transcripto era el verdadero, logrè verosímilitud en ambos. Las consignas de Valentín nos llevan a observar que es la segunda opción presentada la que definía Vivi, su personaje, y no en la primera serie, ya que ahì eran frases dichas para otro. Verónica le sugiere reescribir las frases tal cual son dichas (en estilo directo, para saber còmo habla el personaje), luego podrà incluirlas en una historia. En la resoluciòn de la segunda consigna, nuestro compañero no escribiò estrictamente un diálogo sino que relata las situaciones, ambas son imaginarias. Vero dice que ambos textos son interesantes y podrían ser parte de una creación en serie de distintas “Noches de amor”. También trabajamos la segunda versión de “Para Silvana”, nos gustó más con las correcciones realizadas. Para termnar, leímos la segunda versión de”Amistades”, se hicieron correcciones de forma y gramaticales. Después se leyó “Todos los No”, de A.M Shua. De allí salen las consignas. 1.Escribir un texto poético, a la manera de Shua 2-Escribir un texto narrativo que comience y termine con la palabra NO. 3-Escribir un diálogo en el cual todas las intervenciones de uno de los personajes comience con la palabra NO Para la próxima
Consignas, de Silvia, 
Una ternura de escuela, de Nélida,
Cajita feliz, de Valentín.


Encuentro del 18



Hoy nos hallamos otra vez organizando la muestra, se espera respuesta de la Municipalidad y Mirabeles, pensamos en tercer o cuarto sábado de noviembre.
Comenzamos con Una ternura de escuela, de Nélida. Silvia considera genial su título, totalmente irónico. Nélida lo cuenta como triste experiencia, Verónica sugiere intercalar las frases que dice el personaje con las intervenciones del narrador, para lograr una retroalimentación mutua.
Continuamos con Consigna, de Silvia, en la que describe a un personaje que sólo quiere y considera a su familia y amigos (círculo chico), más allá una violencia inmanejable. Prototipo de “clase de mierda” (Kartum), estereotipo real que pulula desde hace mucho tiempo en nuestro país.
Leemos “Cajita feliz” de Valentín. Relato actual en el que  el narrador reivindica las clases sociales postergadas, Silvia dice que pivotea entre lo irónico y la verdad absoluta del relato, texto duro entre ficción y realidad, de alto nivel narrativo, registro culto y lenguaje formal que refuerza el sentido de la historia. Valoramos el conocimiento de los diferentes textos que escribe, en los que utiliza un lenguaje técnico-profesional, específico de la actividad que realizan esos personajes.

Para la próxima:

Importante: Seleccionar textos para la publicación y lectura en la muestra.

El frasco, Miriam y Valentín.
Relato familiar y El juego, Nélida.
Consejos, Miriam.
Jugueteando, Valentín.

Encuentro del 25

Comenzamos a organizar y decidir como encargar las invitaciones, elegimos diseño en blanco y negro. Verónica nos describe el lugar que nos cedió el Centro Municipal de Artes, se organiza la música y la comida.
Seguimos con la selección de los textos para la publicación, leemos El frasco, de Valentín y el que escribí. Tratamos de elegir las producciones para publicar y también, para leer en la Muestra, dejamos que Verónica los ubique de acuerdo al espacio de la publicación. Debemos mandar los textos para publicar por mail.

Leemos El juego, de Nélida, hermosas imágenes sensoriales, un volver a la niñez, muy nostalgioso, es una explosión de colores y sentidos.
Luego trabajamos mi texto, Consejos, las revelaciones de una madre que reconoce su error al final.

Para la próxima:


Ir preparando la lectura de Lorca, asegurar la elección de los textos para leer en la Muestra.

Encuentro del 27: Realistas x3: Blaisten, Castillo y Shua

Para ponernos en clima, vimos este corto sobre el cuento de Abelardo. No se cuida mucho la estética, pero sirve para recordarnos el argumento.

Ya estábamos en condiciones de empezar a analizar “El marica”, el cuento de Castillo. Lo relacionamos con “La mamà de Ernesto”, otro de sus cuentos que leímos en años anteriores y que al parecer les gustó más a los talleristas. Vislumbramos en ellos el tema de la traición, de la amistad, de los códigos masculinos y valoramos aquí más la forma narrativa que el contenido.
Para mi sorpresa, decidieron pasar rápidamente al cuento de Ana María Shua, que fue el que más les gustó. Destacaron la verborragia de su protagonista, la utilización de un registro oral y coloquial muy logrado y la gran verosimilitud de la situación inicial, del personaje y de su historia. Aproveché para remarcarles cómo la situación de enunciación (la sesión de depilación) funciona como un leit motiv que permite un uso magistral del tiempo de la narración, que se verá permanentemente interrumpida por más de un tiempo pasado que irrumpen en ese presente. Las chicas destacaron la simbología del color de los malvones, la inadaptación de esos inmigrantes y el deseo de arraigar, como las plantas. También observaron la importancia de la figura de la madre que le permite a la narradora contar su propia vida en retrospectiva.
Para finalizar nos fuimos a Blaisten y su particular humor en “El tío Facundo” y esos personajes estereotipados que no se permiten el placer y solo lo harán cuando aparezca Facundo en sus vidas, por eso luego habrá que matarlo. Valorizamos aquí la estructura narrativa y yo les marqué (una vez más porque son duros de convencer) el uso diferenciado e irónico de los clisès y lugares comunes con los que Isidoro presenta a sus personajes. También recordamos los cuatro elementos que generar el humor: el absurdo (situación disparatada), la parodia (imitación burlesca, homenaje), la exageración (sobredimensionar) y la ironía (expresar burlonamente lo contrario de lo que se quiere comunicar). Notamos en este texto presente tres de estos elementos, pero no la parodia. Sin embargo, mientras tipeo este post, pienso en la forma elegida para ocultar el cadáver del tío Facundo y no puedo dejar de pensar en Poe, así que creo que este autor se divirtió de lo lindo creando este cuento y se permitió además, homenajear de esta manera al gran maestro del fantástico.
Para finalizar dos bellas consignas, que más que consignas son ejercicios para futuras escrituras:
1-      Definir personajes (y si se desea indagar en uno mismo también) a partir de lo que dicen, listando sus frases
2-      Transcribir un diálogo escuchado en la realidad lo más literal que se pueda y presentarlo junto con otro diálogo ficticio (La idea en el próximo encuentro es descubrir al verdadero).

Para la próxima, textos de los talleristas.


¡Nos vemos!