jueves, 25 de abril de 2013

Encuentro del 22 de abril

Comenzamos repartiendo el material de Idea Vilariño, poeta a la que leeremos en 15 días, ¡así que a no faltar el próximo lunes 6 de mayo!

Luego comenzamos con el análisis de los textos. Con "Mozo, café para cuatro" no acordé con el resto de las talleristas, ya que me gustó mucho su ritmo,  lo leo en tiempo de 2x4 y me seduce ese in crescendo de imágenes,  enumeraciones y ritmo de bandoneón. Será decisión de Orlando entonces si lo hace "más prolijo" o lo deja así.
Con el texto de Silvia, "De cara al invierno", sucedió algo muy curioso y es que resultó muy marosiano. Es decir, su escritura es muy similar a la de Marosa Di Giorgo, poeta que analizaremos en breve en el taller y que su autora declara desconocer por completo. ¿Cosas del inconsciente colectivo?
Pero el parecido es innegable en atmósfera onírica, simbólica, en exuberancia, en un erotismo velado e inquietante, en imágenes de infancia y adolescencia ¡e incluso en su estructura, a medio camino entre prosa y poesía!
Otro tanto pasó con el texto de Nélida, escrito en diciembre del año pasado y que me permití leer en clave onettiana, por la cantidad de recursos similares al escritor uruguayo que ella usó. Tampoco lo había leído hasta que lo hicimos aquí el pasado mes.
Maravillas del taller...
Por último, y después de un café que sabíamos que íbamos a necesitar, nos sumergimos en el texto de Inés y quedamos "Atrapados" en él, ya que logró con maestría utilizar los recursos más difíciles de Onetti y seducirnos con su prosa. De todas maneras le pedimos que agregue algunos pequeños indicios que clarifiquen un par de cuestiones porque ¡para eso están los talleres, para pedir más y más! Igual que a Nélida, que le sugerí, ahora que los conoce conscientemente, que intensificara los recursos onettianos de su texto ¡de diciembre!
Y para nuestro próximo encuentro:
- "Enredados", de Nélida
- "La mesa y la luz", de Orlando
- Las cartas entregadas de la consigna grupal ("Una carta" y "las cartas")

¡Hasta nuestro próximo encuentro!

1 comentario:

Jorge Curinao dijo...

Lo verdaderamente importante sucede en las manos.