viernes, 14 de julio de 2017

Evaluación (grupo de los jueves)

Un grupo con mucha energía.

Ayer hicimos la primera evaluación de mitad de año y los resultados fueron altamente satisfactorios. Es un grupo que se integró con una llamativa rapidez y se cohesionó muy bien. Se los nota muy felices de asistir y transformaron este lugar en un espacio placentero y de mucho compromiso. Asisten con regularidad y puntualidad, participan con muchas ganas y tiene responsabilidad en las lecturas de los textos de sus compañeros y de los autores consagrados del programa. Es un momento de mucha producción y hay que aprovecharlo porque probablemente no sea siempre así, de manera tal que los invito ¡a no desperdiciar este excelente momento!
Solo les pedí condensar un poco más sus devoluciones y evitar repeticiones para poder acortar el tiempo que le dedicamos a cada texto ya que está siendo excesivo y por esta razón podemos analizar pocos textos por encuentro. Coincidieron con esta apreciación e intentaremos optimizar mejor el tiempo para poder trabajar con más producciones por encuentro.
Marcela se mostró supersatifecha con el taller y la coordinación, dice divertirse mucho en la escritura y que, a diferencia de otras disciplinas artísticas que practicó anteriormente, aquí puede desempeñarse libremente. En el taller se destaca por su mirada original y descontracturada y fue una grata sorpresa la calidad de sus textos y lo pronto que llegó a la ficcionalización siendo que es la primera vez que encara la escritura literaria. Por supuesto le agradecemos el humor que pone al grupo.
Mirta se reconoce en un "estar empezando" y en la necesidad de despojarse de la abogada que hay en ella para poder escribir más libremente literatura. Dice no sentirse mal por no sentir los momentos de inspiración que antes solía tener. Yo creo que estas sensaciones se deben a que está iniciando una nueva etapa en el contacto con la escritura y que se está tomando su tiempo, la noto en un proceso de integración, observación y asimilación de todo lo nuevo. Ella dice estar en el lugar que quiere estar y sentirse muy estimulada por las distintas voces del taller y sin presiones. Aunque no lo crea, su voz está surgiendo y es respetada en el grupo.
Mariana dice estar muy feliz de venir a un espacio que no está dispuesta a perder, sin embargo reconoce que al principio le costó adaptarse porque temía que las normativas o estructuras del taller atentaran contra su proceso de escritura que define como anárquico. Ahora dice aceptar las herramientas brindadas pero decidiendo ella cuando aplicarlas. ¡Y precisamente de eso se trata un taller! Está en un momento de abundantemente producción y tiene que aprovecharlo al máximo. Le aporta al grupo su gran sensibilidad y carga de afecto y es la más volcada a la poesía, por el momento.
Gretel, que concurrió varios años a otro taller de chicos más jóvenes, tenia ciertos temores de formar parte de un taller de adultos pero se manifiesta muy contenta y agradecida por las devoluciones y la amplitud de criterios que encontró acá. Sus compañeros la definen como "una escritora con todas las letras", por el manejo que tiene de criterios formales que aplica hábilmente en sus textos. Escribe esencialmente narrativa con personajes bien delineados, tramas complejas, remates sorprendentes. Es muy observadora de las cuestiones formales, escucha mucho las criticas y se anima a reelaborar sustancialmente sus textos a partir de las devoluciones.
Beto se define como un buscador y un inconformista, dice que tenia sus pruritos al iniciar el taller, pero que se siente muy cómodo aquí, aunque reclama "un lugar donde le enseñen más a escribir", algo más prescriptivo, tal vez. Dice estar en crisis también con su vocación actoral y que en este momento tiene muchas ganas de escribir. Yo le marco su búsqueda permanente en la escritura, su pelearse con al forma y buscar nuevas maneras de expresarse, hecho que valoro al igual que su cuestionamiento de todo porque también se cuestiona a si mismo y puede absorber lo dicho por sus compañeros. Los compañeros y yo le mostramos las herramientas literarias que de manera intuitiva ya está manejando y con las que nutre al taller. Aprovecho para mostrarles a todo la pestaña de herramientas de este blog.

Fue un encuentro intenso que ni tiempo nos dio para un recreìto, pero contentos por haber reconocido estar el grupo en un excelente momento, hicimos la prueba de analizar en 20 minutos un texto y ¡lo logramos!
Observamos en la reescritura de "Narciso frente al espejo", de Gretel como logró condensar (¡¡de 8 a 3 carillas!!) el cuento y cómo todo adquirió una nueva relevancia, a punto tal que varios de sus compañeros leían ahora otro cuento. Un trabajo arduo y muy difìcil de hacer sobre un texto propio que consistió en quitar todo lo superfluo, evitar las repeticiones, condensar acciones, reformular las conexiones, etc. Pero semejante Frankenstein rindió sus frutos en el texto final logrado.

Felices nos despedimos para dentro de quince dìas en que analizaremos:
-Piel de conejo, de Gretel.
- Cuentos breves, de Marcela.
-Todos los heteronimos de Mariana y sus respectivos textos.
-Cuendo te miro en piel, de Beto

¡Nos vemos!

Evaluación (grupo de los lunes)

Post en preparaciòn

Un grupo que ya camina solo

El pasado lunes hicimos nuestra habitual evaluación de mitad del año con este grupo que viene muy aceitado, trabajando hace seis años varios de sus integrantes, desde el año pasado otro tanto y con la reciente incorporación de Leticia este año. Hay que destacar la apertura para recibir a nuevos compañeros y lamentamos que no hayan podido continuar Giselle y Matías, esperamos que pronto puedan reincorporarse.
Es un grupo que funciona muy bien, a pesar de las ausencias que se hicieron sentir en esta primera etapa del año. En este caso les vuelvo a pedir a los talleristas que traten, en la medida de lo posible, de enviar sus devoluciones cuando no pueden concurrir, así sus compañeros no se quedan con la falta de sus voces.
Todos se mostraron muy movilizados por las lecturas propuestas para este año, principalmente con Gusmán, que luego de ser resistido “les partió la cabeza” y generó una catarata de textos muy  muy interesantes, influidos por su estilo. También los que asisten al taller de lectura indicaron cuánto los nutre hacer las dos actividades en forma complementaria.
Nélida es una de las que se muestra encantada por este programa de lecturas que considera como un hito en su producción, reconoce haber escrito poco pero verse mejor en sus textos y agradece el aporte de los nuevos integrantes. Coincidimos con ella en que sus nuevos textos están mostrando otra manera de escribir, más sutil, más  profunda, más descontracturada. Una nueva Nélida está naciendo.
Miriam nos sorprende diciendo  que no está conforme con ella misma porque se encuentra muy presionada por otras actividades y problemas domésticos. Sus compañeros le retrucan que es muy autoexigente y yo que la veo muy cómoda en el taller y con una considerable producción. Suele ser muy responsable también con las lecturas y devoluciones así que la instamos a que se relaje más y que continúe en este camino de evolución constante que presenta sus escritos por animarse a todas las consignas sin saltearse ninguna. Asimismo le sugiero que tome otros puntos de partida, no autorreferenciales, para ver qué pasa.
Laura también menciona cuánto le gustaron los textos leídos y cómo Pessoa la obligó a salir de su zona de confort y el estímulo que siente para escribir algo distinto a partir de eso. Valoramos las interesantes lecturas que aporta al grupo con su observación detallista y la instamos a repensar en serie su producción de personajes “en recorrido”.
Valentín nos recuerda que siempre tuvo a vocación de escribir y que está aprendiendo a hacerlo más y mejor. Siente que lo nutren mucho los aportes de sus compañeros. Sigue muy productivo, ahora corrige mucho y cumple con las consignas al dedillo. Todos coincidimos en cuánto ha evolucionado su poesía con la incorporación de mayor lirismo y recursos literarios. Las chicas le agradecen también su aporte desde la masculinidad. Y él promete acompañarnos mientras la maquina siga tirando. Se ve que se está contagiando de cierto humor negro.
Leticia reconoce que le gusta mucho estar en el grupo y lamenta los encuentros que perdió por su neumonía. Dice que Pessoa le hizo daño pero que también la hizo pensar. Nos contó un poco más de su proyecto de novela y cómo venir al taller la estimuló para retomarlo. Dice no poder hacer nada por “culpa” de la novela y la invitamos a que no haga nada y solo escriba la novela. ¡Es un buen momento para ella y tiene que aprovecharlo! Nosotros notamos su gran energía, cómo empezó con todo el taller y lo cómoda e integrada que se siente. Agradecemos sus aportes sinceros y nos gustan sus lecturas (y escrituras) no inocentes.
Inès, para no variar, dice que “está haciendo nada”. Esa nada a la que nos tiene acostumbrados. Dice que bajó su calidad y que no estuvo a tono con las lecturas, aunque reconoce que le gustó su texto “Momo y frasco”, producto de su desagrado por Gusman y Artaud. Los compañeros le dicen que es una sensación de ella y que disfrutan mucho el humor que despliegan sus últimos textos. Tal vez esté en un momento de búsqueda interior y hay que permitirse el “paramo” con la esperanza de que después todo florezca, ya que suele darse de esa manera el proceso creativo.
Lamentablemente Sivia no pudo venir a la evaluación por su salud y nos quedamos con las ganas de mostrarle cómo ha tenido una buena producción esta parte del año (a pesar de sus reiteradas inasistencias) y cuán afinada y detallista está con sus últimos textos poéticos. Ya verenos si a la vuelta de las vacaciones podemos recuperar algo de su propia evaluación.


Contentos con la tarea desarrollada hicimos una breve pausa para el café y

Encuentros de julio (grupo de los jueves)

Estos posteos tardìos relatan muy brevemente los encuentros del mes:

Encuentro del 6

En este encuentro acordamos tomarnos unas mini-vacaciones, por eso el 20 de julio no habrá taller y compensaremos en agosto que habrá cinco encuentros en lugar de cuatro.

Comenzamos analizando los Monterrosaurios de Mirta, en el que vemos algunos màs logrados que otros y en los que destacamos el extrañamiento que logra por momentos y el clima onírico evidente en otros.
Seguimos con los Microcuentos de Mariana que presentò una abundante cantidad porque, como confesó luego, le gustò mucho escribirlos. Aquí valoramos la condensación lograda, lo intertextual y la presencia de sus tópicos característicos llevados a estos breves textos.
Terminamos con los Microcuentos de Beto en los que observamos estructuras originales y títulos muy creativos, algunos atrajeron màs la atención que otros.
En nuestro próximo encuentro haremos la evaluación de mitad de año y si nos alcanza el tiempo, los textos que quedaron pendiente hoy.

Encuentro del 13

Realizamos primero la evaluación que posteerè aparte y después del café nos alcanzó el tiempo para analizar Narciso, de Gretel. En esta nueva versión nos asombrò con una gran condensación en la que logrò privilegiar todos los elementos que se diluían en el borrador anterior, dejando el conflicto en primer plano y seduciendo con el erotismo de sus personajes.


Encuentro del 27

Después de nuestras mini-vacaciones, renovados, comenzamos nuestro último encuentro de julio.
Primero leímos Letras breves, de Marcela, microcuentos en los que se destaca la ironía, el humor y una mirada diferente, ya casi característica de su autora.
Seguimos con Cuando te miro en piel, un poema de Beto, con una cadencia cambiante y algunas metáforas muy bellas que hablan de erotismo y amor.
Luego nos detuvimos en Piel de conejo, un texto que gustò mucho, con un marcado in crescendo, de marcado corte erótico, con abundancia de imágenes y un hilo de tensión que no se corta.
Finalizamos con los Heterónimos de Mariana en los que sus compañeros leyeron los tópicos de su autora enmascarados en los heterònimos, pero con una interesante búsqueda de estilos diferentes, acordes a las características bibliográficas de cada uno de ellos, un trabajo muy logrado.

¡Nos vemos!

Encuentros de julio (grupo de los lunes)

Encuentro del 3

En este encuentro analizamos “El tren a Glew”, de Valentín, una historia simple, sin demasiadas vueltas, que muestra cierta ironía en el actuar de los personajes frente a sus circunstancias. Reparamos un poco en los tiempos verbales y las correcciones que deberá hacerle el autor.
Seguimos con “El hundimiento”, de Leticia, con el cual sedujo a sus compañeros que disfrutaron los diálogos de estos personajes y el punto de giro del final, además propició cierta lectura de género. Un título muy acorde. Su autora confiesa luego que le costó escribirlo porque nunca había escrito teatro, sin embargo se llevó muchos elogios por esta ópera prima.
Terminamos con “Otoño”, de Nélida. Un texto existencial con descripción poética de las estaciones, que generó debate acerca del futuro de la protagonista, unos apostaban a la pulsión de muerte y otros a que ganaba la vida. Su autora nos cuenta luego que escribió su propio otoño, confesó lo autorreferencial de un texto escrito desde la crisis del sujeto.
Leticia en algún momento de la devolución dijo: “No me hablen de Pessoa” y me produce mucha gracia esta afirmación cuando este querido portugués y todos sus heterónimos convulsionaron tanto el taller y produjeron tanta escritura.
Para la próxima tendremos la evaluación y si nos alcanza el tiempo:
-Un cuento, de Miriam
-Un pie desnudo, de Leticia.

Encuentro del 10

Iniciamos con la evaluación que la consigné en un post aparte y al finalizar tomamos un cafecito y analizamos “El pie desnudo”, de Leticia, un texto marcado por la mirada de la narradora, que describe un momento fugaz y las conjeturas que le suscitan, conjeturas que serán compartidas por sus lectores.
Luego nos tomamos un ratito para hablar de nuestro postergado proyecto del libro y las novedades de la editora.
Para la próxima, que será el 24 porque nos tomaremos una semanita de vacaciones, tendremos:
-Los amantes, Los amigos y EL sótano, de Leticia y sus heterónimos
-Los tres poemas de Miriam y sus heterónimos
-Soledades, de Valentín
-Vejez, de Inés

Encuentro del 24

Enseguida nos pusimos manos a la obra.
Comenzamos con “Un cuento”, de Miriam, en el que plantea lo ficcional de un historia real que luego de mucho esfuerzo de sus protagonistas se transformó en un cuento de hadas con final feliz. Una temática dura, llevada al papel con la emotividad de lo milagroso y lo metaliterario como un plus  a destacarse. Su autora reconoce la ligazón con una historia real.
Seguimos con "Soledades", de Valentín, leída como una copla tardía del romancero, casi un cante jondo por el dolor que transmite. Le pedimos varias podas y valorizamos ciertas imágenes. Luego su autor, enigmático, dice que surgió este poema luego de recibir cierto llamado…
Luego nos masoqueamos con “Vejez”, de Inés, de la cual sus compañeros dijeron: “es asquerosamente buena, terrible”, a mí me gustó mucho el campo semántico desolador de la vejez, sus compañeros dicen haberse ahogado en la lectura, pero todos reconocemos cierto goce. La autora confesará que la escribió en un momento de crisis y de muchos problemas.
Seguimos con los tres textos heteronímicos de Leticia, en los que se destaca el vínculo de sus autores con el campo de la salud y las diferencias sutiles que pudo establecer entre unos y otros, no dejando duda a quién pertenece cada texto. Aquí se disputaron preferencias y luego Leticia reconoce que Pessoa le partió la cabeza, cómo partió de un fuerte rechazo inicial a emular su proceso de escritura. Un desafío que supo enfrentar eligiendo temas diferentes y que superó con todas las letras.
Para la próxima tendremos:
-Tres poemas heterónimos de Miriam
-Rubiecito inglés, de Laura
-Mamá de Silvia
-La enfermedad, de Inés
-Fantasmas en la noche, de Valentín
-Nostalgia, de Leticia

Encuentro del 31

Hablamos del libro, que probablemente tendremos en la mano en septiembre y coordinamos un próximo encuentro de intercambio con el grupo de los jueves.
Comenzamos con los tres poemas de Miriam y sus heterónimos, en los que vimos claramente cuando la que escribe es la maestra, el niño o el militar y nos emocionamos respectivamente. Un interesante desdoblamiento literario de Miriam, a la que le pedimos que reelabore un poco el primero, el de su ortónima.
Seguimos con “Rubiecito inglés”, de Laura, que escribió luego de emocionarse mucho con una película sobre Billy Elliot. No nos acomodamos al formato poético porque vimos una marcada secuencia narrativa, motivo por el cual le pedimos que retrabaje la forma y mantenga los giros significativos que supo darle.
Luego analizamos “Mamá”, un poema autorreferencial de Silvia con el que logró emocionarnos a todos, incluidas quien les habla (dicen que soy dura), en el que indaga sobre la difícil relación madre-hija. Es una paleta formal diferente de Silvia, pero es entendible que necesite otro vestido para hablar de semejante vínculo.
Continuamos con “Esa enfermedad”, de Inés, que leímos en serie con su poema anterior, Vejez, y en el que continúa con un fuerte campo semántico y exclamativo. Leticia, como lectora nueva de Inés, veía todo lo oscuro, mientras el resto de los talleristas intentaba rescatar la luz, interesantes procesos de lecturas.
Necesitamos una pausa antes de terminar con “Fantasmas en la noche”, un poema de Valentín al que también le aplicamos la máquina podadora y que vincularon con un poema anterior y uno nuevo que acababa de repartir, rescatamos lo visual de sus imágenes.

Para la próxima tenemos:
-La búsqueda, de Valentín
-Heterónimos, de Nélida
-Nostalgia, de Leticia
-La plaza y el ejercicio de Nina y Trigorín, de Miriam

¡Nos vemos!

Tiempo de evaluación

Todo taller literario que se precie de tal y que quiera conservar la coherencia y evolución en la tarea debe periódicamente tomarse un tiempo de evaluación para reflexionar sobre lo andado.
En el Talle literario El escribiente elegimos dos momentos para hacerlo: una evaluación rápida y rectificatoria de rumbo a mediados de año y otra más profunda a fin de año, en la que analizamos lo hecho y lo por hacer.
Ya estamos en julio y en ambos grupos de El escribiente realizaremos la evaluación de mirad de año.
Armé un rápido punteo para orientar la misma, principalmente para ayudar a los nuevos integrantes:
-La evaluación es un balance periódico, un detenernos a reflexionar sobre nuestra actividad, en la que cada uno reflexiona sobre su proceso tallerístico.
-Pensamos la comodidad o incomodidad que sentimos frente al juicio de los demás, cuánto nos importan o no sus críticas, cuántas internalizamos y cuáles no, etc.
-Sopesamos nuestra propia participación en las discusiones y devoluciones a los compañeros.
-Repensamos nuestro proceso de escritura: ¿estoy progresando?, ¿di un viraje en mi producción?, ¿estoy estancado?, ¿me alejé de mi proyecto inicial?, ¿descubrí una nueva forma y estoy experimentando con eso?, etc.
-Consideramos las lecturas de los autores consagrados.
-Observamos cómo marcha lo vincular, las relaciones en el grupo.
-Criticamos a la coordinación.
¡Y todo lo que se quiera agregar!